Saltar el muro y descubrir un nuevo amanecer
discreto, genuino, que abraza con su claridad
y vuelca su rocio fresco y cristalino.
Entrega calor junto con su luz,
su sencillez junto a su sumpatía
y su ser camina encadenado a sus sueños.
Clama por ser capaz de entregar cariño,
de donar a destajo sus palabras,
con sapiencia sus miradas
y sin mezquindades su escencia.
Aparece como el viento que arrastra su figura,
los sentires, las ganas y las caricias
que hacen florear la vida,
que festejan la gloria de saber que la calma llega
y que las emociones se desempolvan
en algun punto del camino,
para dar cabida a un nuevo sentimiento.
Le pido la vida a mi tiempo,
le saco el cuerpo a mi espíritu...
recuesto mi alma sobre la hierba de la vida
y al abrir el libro del destino
en la pagina del hombre agradecido
comparto mi risa con el universo
agradeciendo que un nuevo amanecer,
con nombre de mujer.....
maraca día a día mi vida!!!
Autor. Ropero
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