Y pensar en dos

Sé prudente con tus actos, mide bien tus palabras, mira quien a encontrado el camino más ameno, piensa que tus hechos pueden causar pequeñas heridas que a pesar de que de momento no veamos cicatrices con el tiempo podemos sufrirlas. Vuela lo suficientemente alto como para poder aterrizar tranquilo y lo suficientemente bajo como para ser vista por los demás, mira a tu alrededor porque las cosas que realmente te hacen bien puede que la estés dejando de lado, siente que tienes libertad sobre eso pero no abuses de su honestidad y confianza. Suelta la imaginación para disfrutar de cualquier momento por más insignificante sea, piensa que tu otro yo también puede necesitarte, vibra si no encuentras la manera correcta de llevar al alma a lo más puro del pasar cotidiano. Pero por sobre todas las cosas ama, ama como jamas lo hiciste en tu vida, como si cada mañana vas a volver a empezar, derrocha gestos de amor para que tu otra mitad pueda darte lo mismo, piensa que todo se construye y que para construir hay que estar preparado, y estar preparado significa pensar en dos. Entiende los momentos sufridos, las alegrías y las tristezas de tu ladero, permite que él pueda entrar en tu corazón para sanar esas viejas heridas y no volver a caer en la tentación de ser esclavo de tu pasado, brilla, corre, salta, grita, llora, siente, permite que el fuego de este amor funda el metal en una sola pieza, para que a lo largo de esta torpe vida puedas disfrutar cada día más. Y sueña, sueña que eres única, pero única junto a él, que siempre de a dos se puede, que las cosas parecen de otro color cuando escuchamos, comprendemos, sentimos, miramos, amamos. No esperes nada, porque nada vas a recibir, dalo todo y poco a poco todo lo verás; solo permite que este amor llegue a lo mas profundo de tu ser, sin prejuicios, sin fronteras, sin atracos, todo va a salir bien, siempre y cuando puedas pensar en dos.
Yo hoy decido cambiar mi vida, porque la carne con el tiempo se pudre pero el alma seguirá amándote para siempre y esa es la esencia de mi vida, amarte y amarte, aunque sea lo ultimo que haga, yo le pongo el pecho a las balas, amarte sin cuerpo pero con mucha piel, amarte mas allá de la vida.

Autor: Magnanimo